¿Cuáles son los beneficios de una SSD frente a un disco duro?
En este artículo vamos a explicar de forma clara y sencilla cuáles son las principales diferencias entre las "unidades SSD" o "unidades de almacenamiento en estado sólido" y los discos duros tradicionales. En primer lugar hay que aclarar que las unidades SSD no se pueden denominar "Discos sólidos" o "Discos SSD" ya que no tienen platos o discos donde almacenar la información. Las unidades SSD almacenan los datos en módulos de memoria NAND FLASH.
Mayor ciclo de vida
Las unidades de almacenamiento en estado sólido, gracias a su diseño no mecánico son más resistentes a golpes, de hasta 1.500 gramos. Las unidades SSD están fabricadas con circuitos de memoria NAND Flash. Sin embargo, los discos duros tienen partes mecánicas que son más susceptibles a golpes y daños, sobre todo porque la cabeza lectora tiene una distancia milimétrica con el plato, un golpe fuerte podría desajustar esta distancia y provocar el llamado "aterrizaje" y por tanto, inutilizar el disco.
Velocidades muy superiores de acceso a los datos
Los SSD tienen un rendimiento significativamente superior frente a la unidad de disco duro, tiempos de arranque del sistema instantáneos, una transferencia de archivos muy superior (frente a los 50-100 MB/s de un disco duro, las unidades SSD parten de velocidades desde los 500 MB/s hasta más de 4 GB/s en ciertas configuraciones. En los discos duros sólo se puede acceder a los datos más rápido cuanto más cerca esté de las cabezas de lectura / escritura, mientras que en las unidades SSD todas las partes son accesibles a la vez.
Menor consumo energético
El uso de energía en las unidades de estado sólido es significativamente menor, unos 2W de potencia frente a los 6W del disco duro. Este menor consumo puede alargar la vida útil de las baterías de los portátiles y provoca menos tensión de alimentación en el sistema, haciendo que el entorno de los componentes provoque menos calor.
Unidades más ligeras de peso
Gracias a que no tiene partes móviles, las unidades SSD pueden tener menor tamaño y son capaces de funcionar mejor en entornos ultra ligeros, pesando sólo 77g, frente a los 752,5 gramos de un disco duro.
La eficiencia amortiza el coste
Efectivamente en la actualidad el precio por GB de una unidad SSD es superior al disco duro pero estas unidades ofrecen un ahorro de costes a largo plazo ya que tiene un uso de energía más bajo y nos permite tener mayor productividad en el trabajo diario con una mayor entrada / salidas (IOPS).
Generan menos calor
Los SSD requieren muy poca energía para funcionar, lo que se traduce en una producción de calor mucho menor en el equipo.
Unidades muy silenciosas
Sin partes móviles, los SSD tienen un funcionamiento casi silencioso y no le molestarán con ruidos mientras procesa los datos como hacen los HDD durante momentos de alta carga de datos como los juegos o películas.