Principales diferencias entre Windows 7, Windows 10
Lista de características eliminadas en Windows 10 respecto a la versión anterior.
En esta página analizamos detalladamente cuales son las características de ambos sistemas operativos y por qué no recomendamos la migración de Windows 7 a Windows 10.
Shell de Windows | |
Apariencia y personalización | |
Explorador de archivos | |
Networking (opciones de red) | |
Cuentas de usuario y seguridad | |
Características multimedia | |
Sistema de archivos | |
Configuración del Hardware | |
Juegos | |
Independientemente de nuestras recomendaciones, instalamos en cualquier equipo cualquier sistema operativo que nos indique el cliente, Windows 10, Windows 8.1, Windows 7, cualquier distribución de Linux o incluso sin sistema operativo.
Windows 10 es un sistema operativo desarrollado especialmente para móviles y tabletas que además funciona en ordenadores ordenadores personales o de escritorio. Está íntegramente basado en el modelo de lo que se conoce como apps (aplicaciones de teléfonos y tabletas sencillas y limitadas) y en la nube. Es un sistema operativo comparable a Google Andriod o Apple iOS (el sistema operativo de los teléfonos y tabletas de Apple iPhone e iPad), pero no es comparable con Windows 7 o versiones anteriores, Mac OS o Linux que sí son sistemas operativos para ordenadores personales o de escritorio.
Al ser un sistema operativo para móviles y tabletas tiene, lógicamente, muchas menos opciones y características que un sistema operativo para ordenadores personales o de escritorio como Windows 7 y versiones anteriores de Windows, Linux o Mac OS. Han eliminado muchísima funcionalidad, opciones y características. Además todo es menos configurable y personalizable. En general todas las opciones que estaban en el panel de control están muy recortadas.
También Microsoft toma el control del sistema operativo y hay muchas opciones que Microsoft no deja cambiarlas, aplicaciones predeterminadas ya instaladas que no se pueden desinstalar y carpetas del sistema bloqueadas a las que es imposible acceder y opciones que Microsoft no deja cambiarlas. Las actualizaciones ahora son automáticas y obligatorias. No se puede elegir las que se desean ni se pueden desactivar. Microsoft las instala automáticamente siempre todas y no hay opción ni control de cambiar esto. Y esto ocurre con muchas otras opciones del sistema operativo.
Al igual que Windows 8.x, sigue careciendo del menú de inicio, en su lugar se han limitado a poner la pantalla de inicio de Windows 8.x o de Windows Phone en pequeño que no es comparable al famoso menú de inicio que conocemos y al que estamos acostumbrados y al que han añadido publicidad que Microsoft denomina "recomendaciones". Esta pantalla de inicio continúa teniendo muchas limitaciones y sin apenas opciones de personalización. Todas las búsquedas que se hacen en esta pantalla de inicio, realizan las búsquedas tanto en las unidades de almacenamiento del ordenador como en Internet mediante el buscador Bing de Microsoft, opción que como en todo este sistema operativo tampoco se puede cambiar por otro como por ejemplo si uno desea el buscador de Google.
Microsoft pretende amortizar y obtener beneficio de este sistema operativo mediante publicidad, la venta de apps móviles mediante su tienda de Windows (Windows Store) y mediante servicios en la nube, de ahí que requiera un cuenta conectada a Microsoft mediante el inicio de sesión en los servidores de Microsoft. Aunque existe la opción de crear una cuenta local, el sistema estará constantemente sugiriendo e indicando que creemos una cuenta o iniciemos sesión en los servidores de Microsoft. De hecho muchas funciones no funcionan si no se inicia sesión con una cuenta de Microsoft. Todo el sistema está desarollado en base a las apps, la tienda, los servicios en la nube y la publicidad. De hecho las librerías de programación de Windows 10, incluyen librerías para programar la inclusión de publicidad en el sistema y obtener beneficios por esta.
También hay que destacar que Microsoft está constantemente monitorizando toda nuestra actividad en el sistema, como por ejemplo nuestras búsquedas, nuestra localización, etc. con el fin de poder ofrecer publicidad y servicios acordes con los usos que hacemos del sistema operativo y se reserva el derecho de compartir toda la información que recopila sobre nosotros con otras empresas colaboradoras. Incluso aunque se desactiven todas estas opciones de seguimiento por parte de Microsoft en la configuración, el sistema sigue enviando información a Microsoft que claramente identifica nuestra cuenta o nuestro equipo aunque tengamos tan solo creada una cuenta local.
Windows 10 incluye muchas apps de móviles y tabletas instaladas por defecto, incluso algunas de ellas con publicidad incluida, algo inadmisible en un sistema operativo de pago, y ninguna de estas apps se puede desinstalar. Aunque aparece la opción de desinstalar estas apps, al desintalarlas se limita a borrar el acceso directo a la app y cada vez que instalamos una actualización, o creamos una nueva cuenta, observamos que estás apps que supuestamente habíamos desinstalado vuelven a aparecer. Además todas estas apps son muy limitadas, sencillas, inestables y bastante carentes de funcionalidad. Llama la atención que un sistema operativo del año 2015, su aplicación de correo electrónico por defecto sea una app sencilla y cutre con menos funcionalidad, características y conectividad que la aplicación de correo para Windows 95, Microsoft Mail and News del año 1996. La nueva calculadora de Windows 10, es la misma que la de un teléfono con Windows Mobile 10. De hecho es exactamente la misma aplicación y el mismo código como en todas las apps. De ahí que no tiene sentido instalar o comprar un ordenador para utilizar Windows 10, ya que con un teléfono o una tableta de menos de 300 € con Windows 10 obtienes básicamente lo mismo.
Aunque el arranque de Windows 10 es mucho más rápido que en versiones anteriores, el funcionamiento general del sistema es mucho más lento debido que a practicamente todo el sistema está desarrollado para móviles y tabletas y funciona con apps móviles. De hecho los test de rendimiento realizados basados en cargas del procesador, acceso a memoria y lecturas de las unidades de almacenamiento son mucho más lentos respecto a Windows 7. Incluso con los juegos obtenemos menor renidmiento y fotogramas por segundo (FPS) que con Windows 7.
También hay que destacar la mala calidad en el desarrollo de software por parte de Microsoft desde el año 2010. Todo este sistema en general tiene muchas partes incompletas o desarrolladas a media y otras partes o características que directamente no funcionan. Por ejemplo no se puede crear un punto de red inalámbrico como en Windows 7 o han eliminado la versiones anteriores de archivos. El sistema en general, es muy inestable, está lleno de fallos por lo que falla con bastante frecuencia. Muchos usuarios que han actualizado a Windows 10 desde versiones anteriores de Windows se han encontrado que no les funcionaba la tarjeta de sonido, o el Wi-Fi o que directamente no les arrancaba el sistema mostrando la famosa pantalla azul de error de Windows.
A pesar de todo esto, las aplicaciones normales de Windows, como Adobe Photoshop, AutoCAD, Microsoft Office, etc. siguen funcionando en este sistema operativo, aunque Microsoft pretende que todo se migre hacia apps móviles. También es cierto que Windows 10 tiene incompatibilidades con algunos programas.
Debido a todo esto, Windows 10 es claramente un sistema operativo muy inferior a Windows 7. Con menos características, funcionalidad, opciones, rendimiento, etc. No se puede considerar a Windows 10 una actualización de versiones anteriores de Windows, si no más bien sería una degradación del sistema operativo que convierte un ordenador de escritorio es un teléfono o tableta gigante.
Y todo esto se debe a la mala estrategia de Microsoft de "Dispositivos y Servicios (Devices and Services)" de su presidente Steve Ballmer, continuada por el nuevo presidente Satya Nadella con su estrageia "El móvil primero, la nube primero (Mobile First, Cloud First)" que no solo dejan de lado y abandonan por completo el sistema operativo y los programas para ordenadores personales o potentes, sino que los degradan.
Ampliaremos en breve este artículo para aportar más detalles de todo lo explicado anteriormente, incluso más en profundidad y aportando muchas más explicaciones sobre cada apartado de este sistema operativo, después de casi un año utilizando y probando este sistema operativo, participando en el programa Insider de Microsoft, así como explicando las malas estrategias que está siguiendo Microsoft desde el año 2010.
La cuenta Microsoft Account y las aplicaciones de Windows 10.
Nada más instalar Windows 10, se nos pedirá que creemos una cuenta en Microsoft Account aunque nos dará la posibilidad de crear una cuenta local sin necesidad de registrarnos, eso sí, no tendremos acceso a la tienda de aplicaciones, más del 50% de las aplicaciones de Windows 10 incluidas no funcionaran, y las que funcionan estarán constantemente recomendando que para aprovechar toda la funcionalidad de dicha aplicación debemos crearnos una cuenta.
Aplicaciones como Música, Vídeo o el lector de Libros electrónicos estarán aconsejándonos acerca de la compra de tal canción, película o libro en base a nuestro contenido. Compra que, por supuesto, también se hace desde la tienda de Microsoft.
Además, alguna de las aplicaciones de Microsoft incluidas en Windows 10 incluyen publicidad en forma de banners que van cambiando, algo inadmisible en un sistema operativo de pago, y de pago a un coste muy elevado.
Funcionalidad
Microsoft elimina el Menú Inicio del escritorio clásico para obligarnos a pasar por la pantalla de inicio de Windows. Otros menús y opciones de Windows se encuentran escondidos en las esquinas de la pantalla, donde al pinchar o pasar el ratón se abre automáticamente un menú. El problema es que las opciones y los comandos no están bien situados, no son claros ni intuitivos, y cualquier operación requerirá de muchos más clicks y pasos que con Windows 7. (Esto mismo ya paso en Windows 7 respecto a Windows XP, pero en este caso de Windows 10, en más grave aún). Cualquier usuario nuevo en Windows 10, tardará más de 5 minutos en encontrar como apagar el ordenador, tal y como muestran muchos de los vídeos publicados en Internet.
Luego el salto constante entre el “Escritorio Clásico” y el nuevo entorno de Windows 10 a pantalla completa es un caos y un desastre que hacen perderse constantemente al usuario respecto a la tarea que estaba realizando.
Hay que tener en cuenta que Windows 10 está especialmente desarrollado para dispositivos con pantalla táctil, y aunque funciona perfectamente con teclado y ratón, la experiencia resulta bastante frustrante.
Pongamos como ejemplo una persona que tiene un monitor de 24 pulgadas o mayor. Hasta Windows 7, podía abrir el Menú Inicio, e interactuar buscando programas, aplicaciones, configuraciones, panel de control, carpetas, etc. en un pequeño espacio o área de trabajo. Pues ahora con Windows 10, tendrá que abrir la pantalla de Inicio que ocupa toda la pantalla, y desplazarse con el ratón por TODO el área de la pantalla hasta seleccionar o encontrar el elemento deseado.
Un sistema de pago
Valorando Windows 10, Microsoft ha desarrollado un sistema operativo para obligarnos a pasar por caja y pagar por absolutamente todo. Hay que tener en cuenta que Microsoft se lleva el 30% de la venta de todos los productos de la tienda de Microsoft que no sean suyos.
Prueba de ello es la gran cantidad de usuarios (más del 80%) que durante el proceso de pruebas (beta) de Windows 10 solicitaron a Microsoft una opción para habilitar el Menú Inicio o una opción para poder desactivar todo el entorno a pantalla completa de Windows 10, pudiendo iniciar el sistema en el escritorio clásico como en cualquier versión de Windows. La respuesta de Microsoft a esta demanda fue la de no solo no dar la opción de poder activar o desactivar estas características, sino la de eliminar todo el código que quedaba de ellas en Windows 10 heredado de versiones anteriores para que nadie la pueda habilitar.
¿Y por qué hace esto Microsoft?
La respuesta es muy sencilla. Porque así nos obliga a tener que pasar a la fuerza y utilizar el nuevo entorno de Windows 10 a pantalla completa, donde a lo largo de tantas recomendaciones, tarde o temprano acabaremos cayendo y comprando cualquier producto que necesitamos en su tienda.
Este ejemplo y otros muchos, que se pueden leer en diferentes webs, incluida la propia de Microsoft Building Windows 10 a través de los comentarios, donde se demuestra que Microsoft ha desarrollado un sistema operativo pensado para su bolsillo. No ha pensado ni ha hecho caso en ningún momento a las demandas y sugerencias de los usuarios. No es un sistema desarrollado pensando en el uso, la funcionalidad o demanda de los usuarios. Si no pensado por Microsoft en cómo ganar más dinero y poder hacerle la competencia a Apple iOS y Google Android. De ahí el caos y la improductividad de este sistema operativo.
Otro asunto que asusta es que Microsoft considera el escritorio clásico y todas las aplicaciones que no son de Windows 10 a pantalla completa, es decir, las aplicaciones tal y como las conocemos hasta ahora, como obsoletas, invirtiendo muchísimo dinero en conseguir que todas las aplicaciones, incluyendo las profesionales de empresa, migren al nuevo entorno de Windows 10. Nosotros sinceramente no nos imaginamos aplicaciones como Photoshop, Autocad, 3D Studio, Premiere, etc. como aplicaciones a pantalla completa con letras e iconos gigantes. De hecho si muchos de nosotros nos compramos monitores grandes es precisamente para poder ver más información en pantalla, no para verlo todo más grande.
El PC no ha muerto, pero Microsoft no se ha enterado.
Llevamos más de 10 años oyendo hablar de la muerte del PC. Pero el PC ni ha muerto ni morirá. Determinadas aplicaciones y juegos siempre requerirán de un ordenador potente, con teclado, ratón y pantallas en condiciones donde nunca un portátil, una Tablet, ni un móvil podrán llegar. Hay muchas personas que hasta para escribir con un procesador de textos, prefieren un ordenador de sobremesa por la comodidad de un amplio teclado, espacio para el ratón y una buena pantalla con muchas más pulgadas que cualquier portátil.
Aplicaciones profesionales como Adobe Premiere, AutoCAD, 3DMax, etc. siempre requerirán de un ordenador de sobremesa. Estudios de televisión, de arquitectura, etc. nunca relegarán importantes cargas de trabajo a un ordenador portátil, Tablet o móvil.
Aún queda mucho nicho de mercado y mucho trabajo por hacer a los ordenadores de sobremesa, pero Microsoft no se ha enterado y lo ha abandonado por completo, centrándose en teléfonos móviles, tablets, etc. siguiendo y copiando el modelo de Apple, obsesionado por el éxito de esta empresa en la venta de sus teléfonos y tabletas . Windows 10 no se ha desarrollado para ordenadores de sobremesa, se ha desarrollado para ultraportátiles y tabletas.
Microsoft copia el modelo de Apple.
Microsoft con Windows 10, ha copiado el modelo de Apple y de Android de Google. Pero no el modelo de los ordenadores de sobremesa de Apple, sino el modelo de sus teléfonos iPhone o de sus tabletas iPad.
Windows 10 es un sistema cerrado, más cerrado incluso que el IOS del iPad o del iPhone. Microsoft tiene un control absoluto sobre todo el sistema y sobre todo lo que hacemos. Microsoft, pensando que el PC ha muerto, y viendo el éxito de Apple con su iPhone y su iPad, ha copiado exactamente este modelo para Windows 10.
Es decir, que Windows 10 no compite con Windows 7 ni con versiones anteriores de Windows, sino que compite con sistema Android de Google, o sistema IOS de Apple. El perfil al que está destinado Windows 10, es el perfil de los usuarios de iPhone y de iPad. Normalmente, el usuario de Windows como lo conocemos hasta ahora, era un usuario que preferentemente elegía Windows frente a Mac porque conseguía más libertad. Más libertad en la personalización del sistema, tanto de hardware como de software. Más libertad a la hora de realizar cualquier tarea, instalar cualquier programa, etc. Pues bien, Windows 10 es aún más cerrado que cualquier sistema de Apple, por lo que no es un sistema válido para este perfil de usuarios.
El perfil de usuario de Windows 10 es un usuario de Apple, pero un usuario de Apple nunca comprará un producto de Microsoft, comprará siempre uno de Apple. Por lo que Windows 10 no tendrá ningún nicho de mercado ni ninguna base fiel de usuarios. Este es el principal error que comete Microsoft, abandonar completamente su base de usuarios, centrándose en otro tipo de usuarios que no es el suyo.
Resumen.
Por todos estos motivos, resumidos a continuación, no es recomendable Windows 8:
• Windows 10 está especialmente diseñado para trabajar con pantallas táctiles pequeñas, siendo más complejo de utilizar con teclado, ratón y pantallas grandes.
• Windows 10 es un sistema muy cerrado.
• Windows 10 es un sistema improductivo, nada intuitivo, complicado y caótico. Cualquier tarea requiere de más pasos que en cualquier otro sistema operativo.
• El entorno de Windows 10 es soso, feo y las personalizaciones y configuraciones son prácticamente nulas.
• En Windows 10 todo es prácticamente a pantalla completa y requiere registrar una cuenta para conseguir funcionalidad completa.
• En Windows 10 todo está diseñado para pasar por la tienda de Microsoft y comprar.
Por último y la principal de las razones es que el entorno clásico de Windows 8 es igual que el de Windows 7, con algunas mejoras en el entorno gráfico, pequeñas mejoras en el rendimiento (muy pequeñas) pero que eliminan el Menú Inicio, el entorno "Aero" con las transparencias, los bordes redondeados de las ventanas y cualquier otro efecto del entorno clásico, obligando al usuario a tener que pasar por el entorno a pantalla completa de Windows 10.
Pues bien con Windows 7 tenemos el escritorio clásico SIEMPRE, con transparencias, bordes redondeados y todos los efectos que queramos, con el Menú Inicio de siempre y sin tener que pasar por ningún entorno a pantalla completa que estorbe o moleste. Además es mucho más personalizable y es un sistema bastante estable, que funciona perfectamente con todo el hardware y software actual. Entonces, ¿Qué necesidad hay de Windows 10?
Por todo esto vamos a continuar ofreciendo y recomendando Windows 7 Ultimate a 64 bits y no recomendamos Windows 10.
Windows 10 bajo pedido.
A pesar de todo lo anterior, si cualquier usuario desea Windows 10 o que le entreguemos cualquier ordenador o estación de trabajo con Windows 10 instalado y configurado, no tiene más que solicitarlo en sustitución de Windows 7.