Módulo de memoria RAM de muy alto rendimiento.Quizá esta sea la pregunta del millón y que muy pocos saben responder. ¿Qué es mejor en la memoria RAM, una latencia baja o una frecuencia alta?

Bueno la respuesta es complicada y tiene truco. Está claro que lo mejor es una latencia cuanto más baja mejor, pero es aún más importante la frecuencia, cuanto más alta mejor. A la hora de buscar o comparar una memoria hay que fijarse primero en la frecuencia, cuanto más alta mejor; y después buscar entre los modelos de esa frecuencia, la que tenga la menor latencia de todas.

Las frecuencias de la memoria indican en megahertzios la velocidad a la que trabaja en millones de ciclos de reloj. Por otro lado, se denominan latencias de una memoria RAM a los diferentes retardos producidos en el acceso a los distintos componentes de esta última. Estos retardos influyen en el tiempo de acceso de la memoria por parte de la CPU, el cual se mide en nanosegundos. Resulta de particular interés en el mundo del overclocking el poder ajustar estos valores para poder obtener el menor tiempo de acceso posible.

Las latencias son el número de ciclos de reloj que el módulo tiene de retardo para las operaciones de acceso/lectura/escritura, en términos simples. Cuanto mayor sea la frecuencia, más corta es la duración de los ciclos de reloj, de ahí que se aumenten las latencias a medida que aumente la frecuencia: Son más ciclos de retardo, pero cada ciclo es más corto, con lo que el tiempo de respuesta viene a ser el mismo o incluso menor.

Hay personas que piensan que es mejor una memoria a 1.333 Mhz con una latencia de 7, que una memoria a 2.000 Mhz. con una latencia de 9, debido a que piensan que la memoria a 1.333 Mhz. tiene una menor latencia. Pero esto no es así.

Vamos a calcular la duración de cada ciclo, pues a 1.333 Mhz. me indican que en un segundo hay 1.333 millones de ciclos, por lo que la duración de cada ciclo será 1/1.333.000.000.

La memoria a 1.333 Mhz. tendría un tiempo de duración de cada ciclo de 1/(1.333 x 106) = 7.5018754688672168042010502625656e-10, es decir 0,75 ns. Como las latencias indican el número de ciclos de reloj de espera multiplicamos ese valor por los 7 de latencia que tiene esta memoria que nos devuelve 0,75 x 7 = 5,25 ns.

Repetimos la operación con las otras memorias a 2.000 Mhz. 1/(2.000 x 106) = 0.0000000005, es decir 0,5 ns. Ahora lo multiplicamos por los 9 de latencia que tiene esta memoria y nos devuelve 0,50 x 9 = 4,5 ns. Como resultado esta memoria es más rápida, no solo por la frecuencia a 2.000 Mhz, sino por el tiempo de espera. Los 4,5 ns. de espera es mucho menor que los 5,25 ns. de la memoria a 1.333 Mhz.

Si repetimos esta operación con una memoria a 1.800 Mhz. con una latencia de 8, frente a otra a 2.000 Mhz. con una latencia de 9 obtenemos los siguientes resultados:

1/(1.800 x 106) = 5.5555555555555555555555555555556e-10 = 0,56 ns x 8 = 4,48 ns.

1/(2.000 x 106) = 0.0000000005 = 0,50 ns x 9 = 4,5 ns.

A pesar de la pequeña diferencia, se podría pensar que es un poco mejor la memoria a 1.800 Mhz. que la de 2.000 Mhz. pero esa diferencia la compensa con creces esta última ya que al tener una frecuencia mayor dispone de muchos más ciclos en los que transmitir datos.

En resumen, una frecuencia más alta siempre es mejor, dado que hay más ciclos de reloj en los que transmitir datos. Además, la latencia luego será prácticamente la misma ya que a pesar de tener más ciclos de reloj de espera, estos son más cortos al funcionar a mayor frecuencia.